En la República Democrática del Congo (RDC), el Front commun pour le Congo (FCC) de Joseph Kabila se opone al proyecto de revisión de la Constitución presentado la semana pasada por el presidente Félix Tshisekedi. En un comunicado publicado en la noche del domingo 27 de octubre, la coalición del ex presidente llamó a " bloquear " la reforma mediante una "movilización ". El bando de Joseph Kabila también había querido enmendar la Constitución en 2015, desistiendo tras la indignación de la calle y la Iglesia.
En RDC, el Front commun pour le Congo (FCC) se opone a un " no categórico y mordaz " al proyecto de revisión de la Constitución y lanza un " llamamiento a la movilización del pueblo " congoleño para derrotarlo. El pueblo se " levantará " para " defender sus derechos ", " su libertad y soberanía ", amenaza la FCC en su comunicado publicado el domingo por la noche.
La semana pasada, mientras se encontraba en Kisangani, el presidente Félix Tshisekedi había reafirmado su deseo de una reforma de este tipo y había insinuado la creación en 2025 de una comisión de expertos especializada.
Pero el bando de su predecesor Joseph Kabila rechaza los argumentos esgrimidos por el presidente Tshisekedi para justificar su plan. La Constitución de 2006 no fue redactada " por extranjeros ", como ha afirmado el jefe del Estado, sino por " compatriotas que representan la diversidad de la nación congoleña ".
Una " maquinación política "
La FCC acusa al presidente de incurrir en " maquinación política " para " desviar la atención " de su incapacidad para proporcionar " seguridad ". Considera que la reforma constituiría " un peligro para la paz, la unidad y la estabilidad del país ".
En 2015, el bando de Joseph Kabila, entonces en el poder, intentó modificar esta misma Constitución, pero tuvo que renunciar a ello por la presión de la Iglesia, la calle y la oposición.
En la fotografia de cafecera: El presidente congoleño Félix Tshisekedi (izquierda) y su predecesor Joseph Kabila (derecha), fueron aliados al inicio del mandato del primero. Aquí, el 24 de enero de 2019 en Kinshasa. © Jerome Delay / AP
